El detective está más hecho, incluso la acción es más trepidante. Un compañero de colegio musculoso y "cortito" hace una fotos comprometidas a una alumna gracias a Flánagan. Este se da cuenta de la "metedura" y diseñará un plan para anular los hechos. Por otro lado, una guapa gitanilla de ojos negros le pide que investigue la desaparición de un bebé. Recupera "equivocadamente" al bebé... Se enamora de Nines y ambos se convierten en pareja detectivesca, pero surgen dificultades por la distancia social entre ambos... Encajan bien en las aventuras, pero no más. Así que tendrá que decidirse por Carmen, más de su nivel social.
En muchos momentos se viven situaciones que nos recuerdan los relatos de Enid Blyton y sus personajes "los cinco", etc. solo que en un ambiente urbano y más sórdido. Surgen personajes adolescentes que pese al ambiente social en que viven plagado de dificultades son luchadores y alegres. Flánagan saca a relucir los turbios manejos de clases adineradas y corruptas de Barcelona en relación con el comercio de bebés.
Una vez más la ayuda de su hermana será fundamental para el detective adolescente, que además de enamoradizo, es un enredan, nervioso, a veces torpe, crédulo, pero también buen detective por sus deducciones correctas.
1995